
Nunca sabemos por donde nuestro cuerpo desechara algún virus. Por ejemplo el momento en que un moco viscoso anda husmeando por fuera de la nariz. O cuando nos golpeara un ataque de catarro. O que decir de aquellas flemas que parecen mocos salidos de la boca. Guacala. El punto es que si no cuentas con un kleenex a la mano estos momentos se vuelven asquerosamente embarazosos y pegajosos
0 comentarios:
Publicar un comentario