Nunca sabemos por donde nuestro cuerpo desechara algún virus. Por ejemplo el momento en que un moco viscoso anda husmeando por fuera de la nariz. O cuando nos golpeara un ataque de catarro. O que decir de aquellas flemas que parecen mocos salidos de la boca. Guacala. El punto es que si no cuentas con un kleenex a la mano estos momentos se vuelven asquerosamente embarazosos y pegajosos
9/9/10
#331.- Me gusta: Traer kleenex en el bolsillo
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